Alejandro de Anda
LO CLARO. La calidad en la educación que reciben nuestros futuros profesionistas, no sólo es importante en referencia al desempeño que aquellos tendrán para fomentar el desarrollo de su entorno y responder a las exigencias del mercado.
Lo es también en base a la necesidad globalizada de mantener estándares que reclama la evolucionada economía local y mundial.
De esta forma, la Universidad Autónoma de Tamaulipas mantiene en constante observación la evaluación de las carreras que ofrece a quienes pronto serán –y a los que ya son- parte del engranaje productivo.
México se caracteriza por su vocación de servicios hacia ese mundo global, donde la especialización es parte fundamental.
Por tal, el rector anuncia la re-certificación de su carrera de Ingeniería en Mantenimiento Industrial, al igual que al catálogo completo de las profesiones que se ofertan. En especial hoy el Comité de Ingeniería y Tecnología es testigo de este importante anuncio de la Máxima Casa de Estudios que promueve la calidad en los procesos de enseñanza-aprendizaje y que ponen a la vanguardia al estudiantado UAT.
LO OSCURO. La verdad ¿Cuál será la auténtica y única existente?
Dicen los expertos que el significado es ‘la correspondencia entre el pensamiento y la realidad’.
Los verdaderos pensadores –alguna vez lo expresó en su época el joven D. Trump- refieren “La única verdad que existe es la tuya”.
Y lleva mucha razón tal expresión.
Es muy probable que en la verdad de usted exista un Dios barbado de edad anciana, que juzga la conducta buena y mala de los que aquí andamos para premiar o castigar esas acciones.
O quizá no crea usted en nada; o en una mujer divina que ha dado a luz a un ser que salvará nuestra miseria al haber entregado su vida por nuestros pecados.
Todas son válidas. Todas son auténticas verdades desde la individualidad del que las contiene. Esa es y será la única verdad.
En términos ‘terrestres’ lo aplicaremos de otra manera.
Las campañas presidenciales en el México moderno (hablemos del año 2000 al presente) nos propusieron una verdad insoslayable que determinaba el curso de la existencia económica y el tránsito de nuestras vidas.
La seguridad como un bien in-apreciado que los gobernantes cambiaban por unas monedas con quienes viven en el filo de la ley y que sería el factor para realmente gobernar.
Aún hoy el mundo se inunda en redes sociales para demostrar que somos un país con gobiernos fallidos por la disposición a permitir la presencia del crimen organizado como modelo de vida.
Y aquí la otra verdad.
Sin quitar la causa y lo que representa este flagelo que a países como Colombia le tuvieron estancado merced a la enorme presencia sanguinaria del flagelo que tiene como mercado objetivo los estupefacientes (que consume EEUU), no es la criminalidad y su impacto la principal razón de víctimas y de baja económica de México.
INEGI reporta el deceso en 2023 de 352,742 mujeres por padecimientos de corazón, diabetes y tumores malignos. De 431,106 de personas por enfermedades distintas donde inciden los accidentes automovilísticos. De 189,210 personas sólo por afecciones del corazón.
De homicidios por consecuencia del enfrentamiento con bandas delincuenciales 23,000 personas por año.
¡Claro que es un mal que aqueja al país! El mismo organismo (INEGI) estima en no menos de 2.1 millones de mexicanos que habrían sufrido algún connato derivado de altercados de esta causa.
Pero el punto crucial de esta ‘verdad’ de hoy va en un solo camino.
Acaban de terminar las elecciones por la primera silla del poder en los Estados Unidos de Norteamérica. Ganó el empresario Donald J. Trump.
Ni en su discurso ni en el de su oponente la ex vicepresidenta Kamala Harris, tuvieron como eje principal la violencia y la inseguridad como factores de miedo o de cambio.
La certeza que ofrecieron –y por la que ganó el republicano- fue orientada a la seguridad ECONÓMICA.
Al electorado más consumista de drogas en el planeta; al más bélico; el que más armas vende y le da acceso a cualquier persona, con una simple credencial con fotografía, le importa mucho más la certidumbre de ingresos a la paz social.
¿Por qué los hermanos centroamericanos, haitianos, venezolanos son capaces de transitar a pie, de raid, en bestias abandonando a sus seres queridos, a pesar de conocer que quizá no regresen o mueran en el trayecto?
Por la certidumbre económica.
Esa es la única verdad real y existente que mueve a las organizaciones, países y en general al mundo entero. Asegurar los ingresos para comer.
Nuestro país, a pesar de los funestos panoramas contradictorios de quienes infunden pensamientos de terror o de que a la llegada a su segundo periodo presidencial del vecino Trump, acabará con México, parece ser que poco conocen de la economía presente y futura de esa nación.
De lo que usted y este escribano realizamos día a día por garantizar el futuro de los que nos continuarán.
Hay mucho México pa’delante.
COLOFÓN: Y sí, la morenita del Tepeyac sería la verdad en la vida del Claroscuro… Todos, sin excepción provenimos de una madre.
Cada quien su verdad.
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