Poco más de la mitad de sus niveles ha perdido en captación la Laguna de Champayán, que pasó de 1.20 centímetros que se registra en temporada normal a 55 centímetros en su última medición, situación que sigue alertando a las autoridades.
«La Laguna de Champayán enfrenta problemas serios en su afluente, los cuales se agudizarán en los próximos dos meses con el estiaje pronosticado por instancias competentes», reveló el subdirector de Ecología en el Ayuntamiento de Altamira, Oscar Daza González.
Ante la sequía que se presenta por la ausencia de lluvias en la zona, afirmó, el vaso lacustre está llegando a su límite crítico para el suministro de agua, ya que actualmente se han reducido poco más de 60 centímetros los niveles de la cuenca.
Hasta el momento no se puede definir si el dragado del cuerpo de agua podría iniciarse para este año, «el gobierno local necesita ver los alcances y qué tanto se podría manejar el proyecto, hasta el momento estamos esperando resultados de estudios».
Daza González refirió que «es un tema delicado por el estiaje, el Centro de Investigación en Tecnología Aplicada (Cicata) está efectuando estudios para analizar qué método se debe implementar, ya sea el dragado u otra técnica para prevenir la falta de agua».
Concluyó detallando que «los métodos de saneamiento deben ser sustentables, actualmente la laguna tiene problemas por su bajo nivel y aunado a la falta de la tratadora de aguas residuales ahí son depositados los desechos del municipio».
Para poder construir una planta de aguas residuales en el municipio de Altamira se necesitan 15 millones de dólares, es decir unos 150 millones de pesos, pues de la laguna se provee el agua para consumo humano del área conurbada de la entidad.
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