Tampico.- La desecación de los vasos lacustres en el sistema lagunar del Tamesí está derivando en una mortandad de peces, lo que origina además de la perdida de la biodiversidad de los cuerpos de agua, una situación de alerta sanitaria, derivada de la contaminación que puede generar esta situación.
Durante esta semana han registrado la mortandad de peces en la parte de la laguna del Chairel a la altura de la colonia El Charro, de Tampico debido a la desecación tan grave que se tiene en este cuerpo de agua, condición que se puede replicar en otras zonas del sistema lagunar por estar bajos los niveles.
José Luis león Hurtado, el director de la Casa de la Naturaleza expresó que las condiciones en las lagunas es sumamente crítica al quedar los niveles en los mínimos y en otras como la ubicada en la colonia El Charro sin agua suficiente para soportar la fauna, lo que implica ya una condición grave, pues muchas especies pueden desaparecer.
“Se pueden apreciar en las lagunas las manchas de peces en busca de agua más fresca, ya que los bajos niveles originan que los vasos lacustres se calienten, los peces andan boqueando, lo que significa que tienen también una falta de oxígeno, por las condiciones en las que está el sistema lagunario”, expresó.
“Hay mucho sedimento que se tiene en los cuerpos de agua, que se suma a las condiciones que se viven en las lagunas, lo que hace que los peces busquen zonas donde puedan sobrevivir, es una situación grave la que ya se tiene en esta parte, pues el río sigue bajando en promedio 10 centímetros diarios”, afirmó.
Expresó que esta situación está afectando a más de 40 especies, entre las más comunes y que son de consumo humano están: la tilapia, guabina, lobina, guapota, jurel, carpa, bagre, entre otras, que han perdido ya las condiciones de su hábitat y que ahora pueden poco a poco ir desapareciendo.
Paulo Monsiváis