Altamira.- El operador de una estación de servicio de gas LP salvó la vida de milagro, cuando un tanque que estaba abasteciendo explotó al no soportar la presión del combustible al interior, se presume que fue esa la situación que provocó el problema. Este incidente dejó a un empleado lesionado con fractura en uno de sus dedos, mientras que dos mujeres presentaron crisis nerviosa.

Los hechos ocurrieron la tarde del miércoles, en la estación de servicio de carburación de la empresa «Emigas» que se ubica en la calle C16 en La Pedrera, en el municipio de Altamira, cuando un cliente llevó un tanque para ser abastecido y cuando lo estaban llenando reventó.

De acuerdo a la explicación de Bomberos Voluntarios de Altamira que acudió a tomar conocimiento y brindar la atención al despachador lesionado con fractura en uno de sus dedos de la mano derecha y las dos mujeres, la cajera y una clienta que presentaban crisis nerviosa, fue un tanque hechizo.

El pasado domingo se registró otro accidente de las mismas características en el Fraccionamiento Haciendas, donde un tanque reparado explotó provocando el pánico entre los vecinos de ese sector y la movilización de los cuerpos de auxilio.

Se trata de un tanque viejo que ha superado la vida útil para contener gas, mismo que muchas personas optan por rehabilitarlos, cortando la parte baja del mismo para reducir su tamaño y la capacidad del mismo, aplicando soldadura en unión sencilla sin haber realizado el debido bisel para fortalecer la unión.

Según las empresas gaseras estos tanques están prohibidos, ya que se trata de recipientes que han sido dados de baja por el riesgo que representan, pero inescrupulosas personas los reparan para volverlos a vender con una menor capacidad y el fondo plano.

Estas características en este tipo de tanques para gas eleva el riesgo de explosión al no soportar la presión de la carga, por lo que en muchas ocasiones los vendedores recomiendan no llenarlos a su máxima capacidad.

Alfredo Márquez