Alejandro de Anda
LO CLARO. La vida diaria se encuentra llena de problemas. Y todos estos tienen solución. Excepto uno.
Para todos los demás, la humanidad nos hemos dotado de herramientas científicas y tecnológicas que nos proporcionan la comodidad y esa solución que demandan para desarrollarnos.
En palabras llanas, es el significado de la investigación.
La academia es pilar fundamental del ejercicio e implementación de la investigación científica.
La Universidad Autónoma de Tamaulipas lo detona a cada paso, concatenado en su plan de estudios profesionales y de nivel medio superior.
Recién impulsa un gran evento magno para celebrar el Día de la Investigación UAT 2024 recibiendo en esta exposición a 400 alumnos de educación media en 52 módulos de exposición de proyectos y la participación de 237 investigadores.
El objetivo es promover la curiosidad y encontrar con la sapiencia del futuro profesionista, la solución a los problemas que nos atañen en el entorno.
LO CLAROSCURO. Seis años de historia nacional, con el agregado de 18 previos de campaña hacia el poder.
La memoria colectiva tendrá en el reciente ejercicio del poder ejecutivo, el aliciente de acercar a las masas a sus gobernantes. Dónde hasta hoy solo existía un divorcio que les comprometía en tiempos eleccionarios con promesas nunca cumplidas.
Dos renglones serán los que le enmarquen en la posteridad al creador de la 4T.
El legítimo ejercicio de la democracia como primer punto. Donde el pueblo se sintió por primera vez representado y consideró como propios a todos los poderes. Incluso por encima del autónomo y monárquico poder judicial, la población mexicana se sintió en manos de su dirigente, dueños de su nación y de su gobierno.
Eso legitimó por encima de cualquier otro mandatario al tabasqueño.
Nunca un representante del ejecutivo saldría al final de su mandato con 73% de aprobación.
85 millones de pobres avalan su gestión.
El más cercano hasta entonces de quienes ocuparan esa silla, fue el oaxaqueño muerto en el exilio Porfirio Díaz.
Quien gobernaba una nación de 13,545,462 habitantes y más de la mitad no hablaban español.
De hecho, por lo menos la mitad de sus habitantes apenas se daban cuenta que habrían cruzado batallas independentistas, ni mucho menos quien sería su presidente.
Hoy con redes sociales y programas de apoyo subsidiario, esa misma gran masa (en proporción) que brinda su respaldo a López Obrador, ven atendidos sus reclamos históricos de atención a un pueblo hambriento.
El contraste es también de gran calado para el análisis histórico.
La polarización será un factor que agravia y que sectoriza con tendencias importantes en la toma de decisiones en cuanto a la aplicabilidad de políticas públicas.
Así se han dado los movimientos que militarizan a las naciones.
Donde el segundo renglón de la mayor importancia lo suscribe el gran recaudo que brindó este sexenio al poder militar.
Su ejercicio de protección a la integridad del pueblo y la garantía de paz en suelo mexicano cambió su visión por una más protagónica.
Contratos oscuros sin rendición de cuentas, las obras faraónicas que incluyeron el presupuesto de infraestructura pública del sexenio fueron bajo el control de los que solo resguardaban la paz.
No sería el combate a la inseguridad y el ataque a las fuerzas oscuras el condicionante al sexenio López obradorista, si comparamos sus criterios al menos con los tres que le antecedieron.
Todos, así como se deletrea. Todos han obedecido órdenes particulares de la nación vecina del norte. Donde la agencia encargada del combate al tráfico de estupefacientes decide y controla cantidades y personajes que mueven ese tópico al menos en Latinoamérica y en funciones, lo que sucede en México.
Así que, la alta democracia será un buen aliciente como legado de Andrés Manuel, con el grave contraste de padecer a un gobierno poco transparente y con una milicia tan empoderada (muy por encima de Harfuch, que tendrá apenas un aparador para auto promoción) que asusta.
COLOFÓN: El 73% de popularidad no es cualquier cosa. El López obradorismo seguirá vigente hasta que surja un nuevo caudillo.
¿Cien años más para la 5T?
@deandaalejandro