En este día tan bello les obsequio un poema que brotó espontáneo de mi emotivo corazón mientras platicaba con las radiantes estrellas que tachonan el universo infinito. Se llama Moralina en comprimidos. Disfrútenlo:
Esta sociedad tan manca
Que presume de moral,
Cuestiona tus armas blancas
Nomás porque eres puñal.
Trasvesti solo de noche
De noche y de madrugada,
Pues te gusta el huitlacoche
Revuelto con mermelada.
Te hieren con su sonrisa
Y te marcan con un sello,
Pero el chico que te atizan
Sólo es tuyo y nunca de ellos.
Eres la luz de una noche
Cuando se esparce tu olor,
No saben que el huitlacoche
Es casi, casi una flor.
Y si los hombres te pisan
Siempre estaré de tu lado,
Porque el chico que te atizan
No se los pides prestado.
La gente nomás critica
Porque notiene que hacer,
No le haceque seas marica
Yo siempre tehe de querer.
Rectas
En losmomentos difíciles de la vida usted debe levantar la cabeza,
sacar pecho y decir conmucha seguridad: ¡Ahora sí, ya me cargó la…!
Los psiquiatras dicen queuna de cada cuatro personas tiene alguna
deficiencia mental. Si estás con tres amigos y no notas nada raro,
entonces, el retardadoeres tú.
Lo duro no es aguantar elpeso de los cuernos sino mantener la vaca.
Para lograr un objetivoes necesario soñar. No pierda tiempo, larga todo al carajo y vete a dormir.
Si usted todavía noencontró la persona ideal, ¡diviértase con la que
tenga a la mano!
Le rindo un humilde homenaje a nuestro compatriota, Manuel Gutiérrez Nájera.
“Voy a matarme porque no tengo una sola moneda en mi bolsillo, ni una sola ilusión en mi cabeza. El hombre no es más que un saco decarne, que debe llenarse con dinero. Cuando el saco está vacío, no sirve para nada.”
Ya se está el baile arreglando.
Y el gaitero ¿dónde está?
Pero en seguida vendrá.
– Está a su madre enterrando.
– Y vendrá- Pues ¿qué ha de hacer?
Cumpliendo con su deber
Vedle con su gaita; pero
¡Cómo traerá el corazón
el gaitero
el gaitero de Gijón!
La niña más habladora
– ¡Aprisa, le dice, aprisa!-
Y el gaitero sopla y llora
poniendo cara de risa.
Algunas noches –continúa nuestro escritor y poeta-, enlos grandes bailes, fatigado de la fiesta, huyendo de las conversacionesprivadas y de los amigos impertinentes, me pongo a pensar en esos pobresmúsicos que,
Cómo ganan sus manos
El pan para sus hermanos,
En gracia del panadero
Tocan con resignación
Como tocaba el gaitero,
El gaitero de Gijón.
Gur bay