Tampico.- La Diócesis de Tampico aclaró que no ha realizado ninguna solicitud de apoyo económico por parte de la familia del padre Pedro Cruz, para la atención médica debido a las complicaciones en su estado de salud, luego de que se difundieran mensajes pidiendo donativos a nombre del sacerdote.
Mediante un comunicado oficial, las autoridades eclesiásticas advirtieron que cualquier petición de ayuda que no se haga a través de los canales oficiales debe ser considerada como falsa.
El vocero de la Diócesis en Tampico, Néstor Javier López Rodríguez, explicó que la solicitud de apoyo que estableció la familia fue para la donación de sangre y no de dinero.
“Nuestro querido sacerdote fue inicialmente internado en el Hospital Cemain por un sangrado de próstata, donde fue sometido a un procedimiento láser. Posteriormente, debido a una recaída, fue trasladado al Hospital Beneficencia Española, donde recibió nuevas intervenciones médicas.
Sin embargo, al agotarse el seguro de gastos médicos (OCEAS), y en todo momento acompañado por su familia y por esta Diócesis, fue trasladado finalmente al Hospital Civil de Tampico “Dr. Carlos Canseco”, donde permanece actualmente recibiendo la atención médica adecuada”.
Señaló que el sacerdote Pedro Cruz ha declarado públicamente que en ningún momento ha faltado el apoyo de su familia ni de la Diócesis de Tampico. Tanto su familia, dentro de sus posibilidades, como esta Iglesia diocesana, hemos estado atentos y solidarios, cubriendo los gastos necesarios para su atención y medicamentos
Explicó que de acuerdo con la información proporcionada por el padre la familia se deslinda de cualquier solicitud económica que haya circulado de manera indebida en redes sociales.
“Es importante señalar que los datos bancarios y personales difundidos en otros espacios fueron utilizados originalmente solo con fines de solicitud de donadores de sangre y no para pedir apoyo económico”.
“El padre Pedro ha expresado su profundo agradecimiento a la Diócesis de Tampico por su permanente apoyo; de la misma manera, a Mons. Óscar Efraín Tamez Villarreal, Administrador Apostólico; a los sacerdotes que le han acompañado con particular dedicación; al Pbro. Benjamín, encargado de la Casa Sacerdotal; al Pbro. Jorge Bernardo, encargado de los enfermos; a los grupos de laicos que generosamente organizan turnos de cuidado; y a su familia, que, a pesar de sus compromisos laborales, no ha dejado de acompañarlo”, dijo.
Señaló que debido a la recuperación del padre entre el lunes y martes podría ser dado de alta del Hospital Civil “Dr. Carlos Canseco”, para continuar su recuperación desde la casa sacerdotal.
Yadira Hernández