Capturan a tiburón martillo en la Isla del Padre

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Isla del Padre.- Una escena digna de documental se vivió en las playas de la Isla del Padre, al sur de Texas, cuando un tiburón martillo de proporciones colosales emergió de las profundidades.

El ejemplar, de más de cuatro metros de largo y un peso superior a los 450 kilos, fue capturado brevemente y liberado por el grupo Boca Chica Beach Legends (BCBL), dedicados al monitoreo y conservación de especies marinas.

El pescador Joe Gonzales, junto a su equipo, protagonizó esta historia que comenzó entre percances mecánicos con el remolque de un jetski y problemas con su 4×4.

Todo cambió cuando su caña personalizada, una “Texas Surf Masters”, se dobló bajo la fuerza de algo descomunal. Lo que siguió fue una captura de 40 minutos en la que la línea gritaba y las olas se rompían alrededor del lomo de un martillo gigantesco de casi 4.42 metros, apenas una pulgada por debajo del récord mundial.

Con maniobras expertas y un compromiso absoluto con la vida marina, el equipo logró llevar al tiburón martillo a la arena para registrarlo, medirlo y liberarlo sin causarle daño. La liberación fue perfecta, y el tiburón regresó al océano como una sombra majestuosa que se funde con el azul profundo.

Este ejemplar podría tener entre 35 y 40 años, una auténtica leyenda viva del Golfo de México. Los científicos han documentado que los tiburones martillo migran miles de kilómetros, cruzando del Caribe a Centroamérica, y sobreviven tanto a tormentas como a amenazas humanas.

Su característica cabeza en forma de martillo no es solo estética: funciona como un radar submarino con visión casi total y sensores que detectan a sus presas bajo la arena.

Más allá del asombro, este episodio destaca la importancia de prácticas responsables como la captura, fotografía y liberación, fundamentales para la conservación de estos depredadores tope.

El tiburón martillo es más que un símbolo del océano: es un testimonio del equilibrio natural y de la resistencia marina. Gracias a acciones como la de BCBL, el Golfo de México sigue siendo hogar de gigantes. Y quizás, algún día, este mismo tiburón vuelva a cruzarse con Joe y su equipo, más fuerte, más grande, y aún libre.

Mario Cruces